Así es como trabaja la BUAP para prevenir el suicidio

Cada año, la DAU brinda alrededor de 7 mil consultas psicológicas

Por Dorsia Staff

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el suicidio es la segunda causa de muerte a nivel mundial entre personas de 15 a 29 años. Esta problemática se agudiza no sólo por grupos etarios, debe abordarse también desde una perspectiva interseccional: en 2016, ese organismo internacional detectó que 79 por ciento de los suicidios ocurridos en el mundo –casi 800 mil– tuvieron lugar en países de ingresos bajos y medianos.

La BUAP ha emprendido acciones encaminadas a prevenir y atender esta problemática de salud pública. Una de ellas es el programa permanente “He decidido vivir”, emprendido por la Dirección de Acompañamiento Universitario en colaboración con el Cuerpo Académico Psicología y Salud, de la Facultad de Psicología; la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) Konkon, de la Facultad de Ciencias Biológicas; la Compañía de Danza Contemporánea (CODACO) del Complejo Cultural Universitario (CCU) y el Jardín Botánico.

Con actividades itinerantes en distintas unidades académicas, bajo el hashtag #PedirAyudaTeFortalece, se buscará crear conciencia en la comunidad universitaria en la prevención del suicidio y en las vías de apoyo psicológico para atenderlo. Durante su semana de lanzamiento, el programa visitará las facultades de Arquitectura, Ciencias de la Comunicación, Medicina, Filosofía y Letras y Administración, donde realizará talleres, presentación de testimonios de vida, cine debate y pláticas sobre temas relacionados con la prevención del suicidio, entre otros.

La depresión tiene muchas caras

Si bien existen servicios de atención psicológica, uno de los factores capitales para hacer frente a esta acción -la cual cobró 6 mil 291 vidas en México durante el 2016, según el INEGI-, “es  romper el estigma: muchas veces no van al psicólogo porque creen que no es necesario”, afirma Betty Dimas Olea, psicóloga encargada del Servicio de Atención al Bienestar Emocional de la DAU.

El área que dirige brinda ayuda psicológica a todos los niveles educativos de la BUAP, tanto presencial como telefónica. A través de 13 consultorios ubicados en distintas zonas de la Universidad, se dan casi 7 mil consultas psicológicas de forma anual, en las cuales se atiende a la comunidad estudiantil activa, en temas como ansiedad y depresión, condiciones de riesgo que pueden influir en la decisión de quitarse la vida.

En caso de detectarse una condición patológica mayor, los especialistas pueden dirigir al paciente al servicio de psiquiatría mediante el seguro médico institucional. A partir de octubre de 2018, esta oferta se amplió al interior del estado con el primer consultorio regional en Tehuacán.

Asimismo, desde hace cuatro años se habilitó el Servicio de Atención a Crisis Emocionales, a cargo de la misma dependencia. La asistencia brindada es a través de vía telefónica en el número 2223 44 89 05 y está disponible las 24 horas. Cuando la situación lo amerita, se establece contacto con las oficinas del 911, la Fiscalía General del Estado de Puebla o el Instituto Poblano de las Mujeres. De acuerdo con Dimas Olea, la incidencia de llamadas ha aumentado desde que se instauró el programa hasta alcanzar hoy en día un promedio de 40 por mes.

«La parte emocional incluye todas las esferas de su persona; lo que queremos es que esté bien y que tenga una salud mental adecuada», explica la especialista. Y es que si bien a la depresión –uno de los factores fuertemente asociados al suicidio-  se le ha relacionado a prácticas como el llanto y el aislamiento de la persona, tiene diversas maneras de manifestarse.

 “A veces la gente cree que alguien se ve ‘normal’, se ve ‘bien’ y dice ‘no puedo creer que se haya suicidado, estaba sonriendo, estaba muy bien’. Pero a pesar de ello se puede tener una depresión muy fuerte porque tiene muchas caras, no siempre se manifiesta llorando, tiene demasiadas caras. A veces, aunque los chicos se sientan aparentemente bien, puede que no sea así”

Además de las acciones emprendidas por la DAU, la Facultad de Psicología de la BUAP cuenta son servicios especializados para atender este fenómeno, causante de los 3.6 decesos por cada 100 mil habitantes que se registraron en el estado de Puebla durante 2016. Esta, una de las tasas de suicidio más bajas a nivel nacional, contrasta con entidades como Chihuahua y Yucatán, que en el mismo año registraron un índice de 11.4 y 10.2 muertes por esta causa, respectivamente.

Al respecto, en la unidad académica opera el Servicio de Intervención en Crisis y Atención al Suicidio (SICAS), coordinado por Gilberto Islas Cruz y el cual brinda servicios en los niveles preventivos y terapéuticos. Además de talleres de sensibilización frente al suicidio, violencia doméstica y formación de grupos de autoayuda, el SICAS ofrece asesoramiento psicológico en resolución de crisis, manejo del duelo y enfermedades terminales, entre otras líneas.