lunes, noviembre 18 2024

A nivel mundial hay alrededor de 50 millones de personas con demencia, de las cuales dos de cada tres tienen su origen en el Alzheimer. Para el año 2050 se calcula que habrá 131 millones de personas con dicha enfermedad, la cual reduce hasta en un tercio el tamaño del cerebro y genera alteración en las células nerviosas que procesan la información neurológica.

A pesar de esta reducción pueden no existir cambios cognitivos. El deterioro se observa 20 años después de presentar síntomas, ya que durante este lapso el cerebro compensó el daño, así lo dio a conocer el doctor Agenor Limón, investigador de la University of Texas Medical Branch (UTMB), en Galveston, Texas, al participar en la Semana Internacional del Cerebro 2021, organizada por la Facultad de Ciencias Químicas (FCQ).

“Los daños al cerebro son continuamente compensados por plasticidad y reorganización del cerebro. Con el paso de los años, disminuye la densidad de la corteza cerebral, por lo que se puede perder un tercio de la corteza y puede no existir un cambio. Además, una persona puede perder la mitad del cerebro en una cirugía y con rehabilitación se le ayuda a contrarrestar el daño cognitivo”.

El egresado de la BUAP indicó que los primeros sitios afectados por la enfermedad de Alzheimer son las zonas asociadas con la memoria, como el hipocampo y la corteza temporal medial. Después el daño se extiende hacia las partes frontales y posteriormente avanza hacia las partes occipitales. “En el Alzheimer uno de los primeros síntomas es la memoria, porque los centros de memoria son los primeros que empiezan a ser afectados”.

El doctor Agenor Limón, adscrito al Mitchell Center for Neurodegenerative Diseases, del Departamento de Neurología, refirió que existen ciertos individuos que presentan toda la patología de Alzheimer, pero no muestran neurodegeneración y se mantienen cognitivamente intactos, a pesar de la presencia abundante de placas y marañas consistentes con la enfermedad.

Alzheimer, un problema de salud pública

Al participar en la Semana Internacional del Cerebro 2021, la doctora María del Carmen Cárdenas Aguayo, de la UNAM, dio a conocer que uno de cada tres adultos mayores muere de Alzheimer u otro tipo de demencia, lo que ha colocado a esta enfermedad como un problema de salud pública en el siglo XXI, debido además a su crecimiento exponencial: en Estados Unidos, la población con Alzheimer pasó de 5 millones a 6 millones en tan sólo un año.

El Alzheimer es una enfermedad que si bien fue descrita hace más de un siglo, a la fecha no tiene tratamiento ni cura. Se trata del tipo de demencia más común en el adulto mayor: representa entre 60 y 70 por ciento del total de estos casos, cuyos cuidados a pacientes en Estados Unidos representaron 355 billones de pesos, de acuerdo con el informe más reciente.

Durante la actual pandemia por COVID-19, la demencia tipo Alzheimer se ha incrementado en 16 por ciento, y quienes padecen esta enfermedad tienen el doble de probabilidades de contagiarse del virus y morir por esta causa, afirmó la investigadora, durante su conferencia “Búsqueda de biomarcadores para la enfermedad de Alzheimer”.

La doctora Cárdenas Aguayo despejó la idea de que el Alzheimer es una enfermedad de la población anglosajona: los registros actuales señalan un crecimiento en América Latina, donde se calcula que hacia el 2030 habrá 10 millones de personas con demencia –dos terceras partes de esta enfermedad tiene su origen en el Alzheimer.

Por su parte, Gerardo Santos López, doctor en Genética y Biología Molecular por el Cinvestav del IPN, hoy investigador del Centro de Investigaciones Biomédicas de Oriente, impartió la conferencia “Las nuevas variantes de SARS-COV-2”, en la cual explicó la capacidad de mutación alta que tienen los virus ARN, debido a que este no posee la capacidad de corregir errores. Entre los tipos de mutación que presentan se encuentran eliminación de segmentos en la cadena genética, o bien inserción o sustitución.

Estos cambios genéticos, dijo, el también nivel II del Sistema Nacional de Investigadores, dan lugar a cambios antigénicos y cambios funcionales. En el caso de las nuevas variantes que hoy circulan en México, señaló que al parecer siguen produciendo la misma enfermedad, aunque es posible que algunas puedan reinfectar porque escapan a la respuesta inmune generada por la vacuna.

El programa continuó con otras confrenecias como COVID-19 y manifestaciones cognitivas, a cargo de la doctora Berenice Silva Gómez; “Las emociones; antes y en el COVID-19″ de la doctora Isabel Martínez García; y sobre el “Mecanismo de inhibición de los canales de calcio CaV3.3”, por parte de doctor José Manuel Pérez Aguilar, todos integrantes de la Facultad de Ciencias Químicas.

Las actividades de la Semana Internacional del Cerebro concluyen este miércoles 17 de marzo. La programación y conferencias se pueden consultar en Facebook: Semana Internacional del Cerebro 2021, FCQ-BUAP

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