Inaugura la rectora de la BUAP clínicas para atención de pacientes con cáncer o diabetes
Por Staff Dorsia
La rectora María Lilia Cedillo Ramírez y la titular de la Secretaría de Salud en el estado, Araceli Soria Córdoba, inauguraron las clínicas en Terapia de Infusión Intravascular y de Heridas y Estomas, del Hospital Universitario de Puebla (HUP), las cuales brindarán seguridad y bienestar a pacientes en el tratamiento de comorbilidades asociadas a diabetes o cáncer, entre otras enfermedades.
Al precisar que un número elevado de derechohabientes del HUP tiene más de 50 años, muchos de ellos con complicaciones por enfermedades crónico-degenerativas, la doctora Cedillo señaló: “Hoy nos da alegría inaugurar estas clínicas, fundamentales en el cuidado de la salud, no sólo por la infraestructura y equipamiento que tienen, sino también por el personal médico, capacitado y profesional, para dar seguridad al paciente; por ejemplo, en la colocación de catéteres de manera segura para evitar infecciones”.
Por ello, resaltó la labor de los profesionales de la salud de ese nosocomio, quienes brindan calidad y calidez a los universitarios: “Este hospital siempre ha dejado una huella imborrable en todos nosotros y en los pacientes”.
La secretaria de Salud en Puebla y directora general de los Servicios de Salud del Estado, Araceli Soria Córdoba, subrayó que la Clínica en Terapia de Infusión Intravascular será punta de lanza para crear otras en los centros hospitalarios de Puebla. De la Clínica de Heridas y Estomas destacó el equipamiento con el que cuenta, como un ultrasonido Doppler que contribuirá a disminuir tiempos de recuperación y complicaciones.
A la rectora Lilia Cedillo le agradeció su compromiso con la salud y reconoció el crecimiento y transformación del HUP en beneficio de la población derechohabiente y de los poblanos.
A su vez, la directora del HUP, María Virginia Ortega Alejandré, refirió que tales clínicas nacieron de la inquietud de médicos y enfermeras para ofrecer mejores condiciones a los pacientes, sobre todo si se considera que el 60 por ciento de los derechohabientes es mayor de 50 años y muchos presentan complicaciones derivadas de padecimientos crónico-degenerativos; la insuficiencia renal, la más frecuente.